Desde el BMW M8 Competition Convertible hasta el Ferrari 12Cilindri Spider, estos roadsters brillan sin importar el clima.
Chevrolet Corvette Convertible
El Corvette “Plastic Fantastic” de Chevy ofrece una sorprendente mezcla de variantes para la octava generación de su convertible biplaza con carrocería de fibra de vidrio, y cada una es tan diferente que nos sentimos obligados a mencionarlas todas. El Corvette eRay Convertible es un híbrido de tracción total increíblemente rápido, que combina un V-8 de 495 hp con un motor eléctrico de 160 hp; alcanza los 96 km/h desde cero en 2.5 segundos. El Corvette Z06 Convertible es un deportivo enfocado, con un V-8 de 670 hp que acelera como un Ferrari; con toda esa potencia impulsando solo las ruedas traseras, alcanza los 96 km/h en 2.7 segundos.
También está el Corvette ZR1 Convertible: un auténtico monstruo de carreras con una versión biturbo de 1,064 hp del motor del Z06, un alerón trasero más adecuado para un avión y suficientes conductos adicionales como para llenar una furgoneta de fontanería. Veremos si puede alcanzar los 60 mph sin derretir sus neumáticos y ruedas.
BMW M8 Competition Convertible
El gran descapotable de dos puertas de BMW lleva en el mercado desde 2019, superando a rivales como el S63 Cabriolet de Mercedes-Benz (QEPD). Puede que su vida termine en 2026, pero perdura hasta su ocaso únicamente en su atractiva versión de competición, donde su potente motor V-8 biturbo genera 671 CV.
Junto con la tracción total, esta variante del modelo es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,5 segundos desde parado, lo que convierte al M8 descapotable en una ganga en cuanto a rendimiento. Además, cuenta con una estética amenazante y un estilo limpio, legado de antes de que los diseñadores de BMW perdieran la cabeza.
Aston Martin Vantage Roadster
Este nuevo Aston Martin de acceso, y su próximo hermano descapotable, son clave para demostrar y difundir la estrategia de gama alta y mayor potencia de la marca. Aún no hemos probado el descapotable, pero el magnífico cupé nos sorprendió y nos cautivó con su agilidad, su aceleración de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos, la estridente banda sonora de su V-8 biturbo de 656 CV y su exquisito interior. Aston lleva mucho tiempo comparando el Porsche 911 con este modelo, y con este último Vantage, por fin lo demuestra. Es fantástico ver cómo Aston diferencia su gama de esta manera.
Maserati GranCabrio Folgore
El GranCabrio Folgore de Maserati sigue una fórmula similar a la del Bentley Continental GTC. Con una cabina de cuatro plazas y potencia distribuida a las cuatro ruedas, el modelo también alcanza un tiempo de 0 a 100 km/h en unos 3 segundos. Pero ahí termina la similitud. Mientras que el Bentley británico es majestuoso y contundente en su apariencia y efecto, el Maserati italiano es sinuoso y ágil. En cuanto al sufijo Folgore en su nombre, que significa “relámpago” en italiano, indica que se trata de la versión totalmente eléctrica de 818 CV del atractivo gran turismo de la marca del tridente (también está disponible un modelo a gasolina de 542 CV). Con una batería de 83 kWh, recorre 374 km con una sola carga.
Rendimiento del Mercedes-AMG SL 63 SE
Al igual que el Porsche 911, el SL de Mercedes-AMG está disponible en siete versiones convertibles con precios que superan las seis cifras. Una vez más, seleccionamos la que consume más energía. Esta versión híbrida enchufable incorpora una batería de 4,8 kWh, que ofrece solo 11 km de autonomía eléctrica, pero añade 201 CV al V-8 estándar de 603 CV, lo que permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 2,5 segundos. Con tracción en las cuatro ruedas y todo tipo de calefacción en asientos, volante, reposabrazos y cuello, además de deflectores de viento eléctricos, este roadster es ideal para disfrutar de un viaje sin techo a la casa del lago, la montaña o la playa, en cualquier época del año.
Porsche 911 Turbo S Cabriolet
Porsche produce siete versiones convertibles de su 911, cada una con características y rendimiento diferentes, y todas con un precio superior a los 100.000 dólares. Pero nos inclinamos por el 911 Turbo S, el modelo tope de gama, que incluye un potente y audaz motor bóxer biturbo de seis cilindros de 640 CV en su robusta parte trasera.
Aunque esa potencia es la más baja de la lista, combinada con su peso en vacío de menos de dos toneladas, líder en su clase, y la tracción total, es suficiente para acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 2,2 segundos. A esa velocidad, el viento no solo podría encresparte el pelo, sino que podría arrancártelo. Ponte sombrero.
Mercedes-Maybach SL 680 Monograma
Para los aficionados al Benz SL que prefieren el lujo absoluto al rendimiento, Mercedes-Maybach ofrece este crucero de bulevar de la marca. Con el monograma M de la marca en capas, tatuado en el capó, el techo, los asientos, la parrilla, los faros, las llantas y en otras partes —como un bolso Louis Vuitton gigante—, será inconfundible con cualquier otro SL. El modelo Maybach también elimina el asiento trasero vestigial del SL y recibe una suspensión y un aislamiento acústico de alta calidad para ofrecer una conducción más cómoda. Cabe destacar, sin embargo, que su motor V-8 de 577 hp aún acelera de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos.
Aston Martin DB12 Volante
Aston Martin ha subido de gama, intentando igualar a Bentley en lujo y a Ferrari en rendimiento. El DB12, el último modelo de la línea de 75 años de la marca británica con el nombre DB, marca la diferencia entre estos dos referentes. Ofrece un potente V-8 biturbo de 671 CV, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos, además de un habitáculo magníficamente equipado. En cuanto al interior, cuenta con una interfaz de infoentretenimiento Aston Martin totalmente nueva y sorprendentemente funcional. Y todo ello se complementa con la capota retráctil que añade la emoción de conducir el coche por carreteras de montaña o por los bulevares frente al mar.
Ferrari Roma Spider
Con “solo” 612 CV de su V-8 biturbo, el Roma Spider de Ferrari es el menos potente de los modelos actuales de la marca, y el menos potente de esta lista. Pero cuando un coche luce tan bien, no necesita presumir de potencia. (Su potencia permite una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,1 segundos). Sutil y elegante, el Roma Spider evoca los descapotables Ferrari de mediados del siglo XX, con una cara sonriente y burlona, una carrocería curvilínea y guardabarros robustos y ondulantes. Su capota de lona no es tan aislante como las capotas rígidas retráctiles de sus hermanos, pero hay una solución sencilla: dejar la capota bajada.
McLaren Artura Spider
El enfoque casi monomaníaco de McLaren se centra en reducir la masa para que los potentes motores de sus coches los impulsen más lejos y a mayor velocidad. En el caso del Artur Spider, su superdeportivo convertible de entrada, esto implica un sistema híbrido enchufable ligero que se combina con un V-6 biturbo para generar 690 CV. El Artura es el primer modelo de la marca británica que incorpora la nueva plataforma McLaren Carbon Lightweight Architecture (MCLA), sobre la que se construyó posteriormente el nuevo modelo insignia, el 750S. Y aunque el Artura no es el McLaren más deportivo, consigue alcanzar los 100 km/h en tan solo 3 segundos, y recorre rectas y curvas como un kart de alta potencia, siempre provocando alegría.
Bentley Continental GTC
Este descapotable de cuarta generación, con 2+2 plazas y tracción total, se ha mejorado con una configuración de motor híbrido enchufable. Esta configuración combina un V-8 biturbo con un motor eléctrico para generar una potencia combinada de 771 CV, suficiente para acelerar de 0 a 100 km/h en unos 3 segundos. La batería de 21,8 kWh ofrece una autonomía de 64 km. Con la capota bajada, puedes disfrutar al máximo del potente rugido del escape o, si estás al aire libre (o simulando sigilo), del susurro de la potencia de un vehículo eléctrico. En cualquier caso, el enorme convertible de tres toneladas domina las carreteras con rapidez y precisión, y siempre llama la atención.
McLaren 750S Spider
¿Quieres un McLaren descapotable más deportivo? Aquí lo tienes. Su V-8 biturbo central genera 740 CV, lo que, combinado con tan solo 1470 kg de masa vehicular, resulta en una aceleración casi violenta de 0 a 100 km/h en 2,3 segundos. La adrenalina convierte cada acceso a la autopista en la parrilla de salida y la recta de vuelta de una carrera de Fórmula 1. Con la capota bajada, esta velocidad también actúa como una cirugía estética temporal, lo cual resulta útil, ya que las arrugas que se forman al conducir este deportivo biplaza podrían volverse permanentes. Con un estilo y un rendimiento tan excepcionales, no sorprende que el 750S se haya ganado el premio al Auto del año 2025 según Robb Report.
Ferrari 296 GTS
La marca del Cavallino Rampante ha ido hibridando paulatinamente su gama de descapotables, primero con el Ferrari Aperta de 2,2 millones de dólares de 2016, luego con el SF90 Spider de 600.000 dólares de 2021, y ahora con el 296 GTS. Quien temiera que la integración eléctrica afectara negativamente la precisa experiencia de conducción que ofrecen los vehículos de Maranello se ha equivocado. El 296 GTS puede ser nuestro Ferrari híbrido favorito hasta la fecha, con una potencia explosiva de 819 CV capaz de impulsar a este dinámico biplaza de 0 a 100 km/h desde parado en menos de 2,5 segundos. Pero es en carreteras sinuosas donde realmente brillan las capacidades magnéticas de este coche.
Aston Martin Vanquish Volante
¿Dejando el mejor Aston Martin para el final? El nuevo Vanquish eleva el rendimiento de la marca con un V-12 biturbo de 823 CV que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, una cifra que supera por poco la del Vantage. Además, ofrece un nivel de suntuosidad que rivaliza con el Bentley Continental GT, con cueros texturizados únicos y aromáticos. Es casi imposible apreciar el encanto de su carrocería de fibra de carbono en fotos. El Vanquish coupé es largo, bajo, ancho y agresivo, pero también increíblemente encantador y delicado. Esperamos que el próximo convertible añada un toque de alegría a nuestra fascinación.
Ferrari Spider de 12 cilindros
El tradicionalismo del Doh-dech-chi Chi-lin-dri se refleja en su nombre, derivado del anacrónicamente derrochador (aunque melodioso) motor de 12 cilindros que genera 830 CV. Y como en todos los Ferrari gran turismo producidos desde la fundación de la marca en 1947, dicho motor se aloja en un largo capó delantero. Según la convención, el motor impulsa solo las ruedas traseras, pero aun así es capaz de acelerar el Spider de 12 cilindros de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos. Un complejo mecanismo para retraer y ocultar el pequeño techo rígido coexiste con un maletero trasero con el tamaño justo para equipaje compacto.
Fuente: Robb Report