Pablo Atchugarry es reconocido internacionalmente por sus impresionantes obras realizadas en materiales complejos de trabajar. Ha expuesto en algunos de los museos más prestigiosos del mundo del arte y fundó su propia institución, que en 2022 inauguró el Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry (MACA).
Nacido en Montevideo, Uruguay, en el año 1954, Pablo Atchugarry se crio en una familia donde la vívida pasión por el arte lo llevó a interesarse por el mundo artístico y seguir una carrera. Sus primeras obras fueron en pintura, y poco a poco fue descubriendo diferentes elementos para complementarlas, como cemento, hierro y madera.
La primera de sus esculturas fue realizada en cemento y se tituló Caballo. A fines de la década de los 70, luego de haber participado en varias exposiciones en Uruguay, Argentina y Brasil, se embarcó a Europa para estudiar y seguir perfeccionando su arte. Luego de haber experimentado varias técnicas y distintos materiales, Atchugarry descubrió la elegancia del mármol y talló su primera escultura en este magnífico material, a la que tituló La Lumiére. En 1982 realizó su primer proyecto monumental en mármol de Carrara.
Las obras de Pablo Atchugarry se han expuesto en los museos más prestigiosos del mundo. En 1999, el artista inauguró el Museo Pablo Atchugarry, y en 2007, la Fundación Pablo Atchugarry, con el objetivo de promocionar las artes, crear un lugar de encuentro para artistas de distintas disciplinas y difundir la cultura a través del conocimiento. La fundación organiza más de 50 actividades gratuitas anuales y recibe grupos de todas las edades, teniendo un flujo anual de más de 250.000 personas.
Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry (MACA)
El museo se creó con el objetivo de posicionar a Uruguay en el mapa de las grandes exhibiciones internacionales y ser un gran atractivo turístico durante todo el año. El MACA suma 5500 metros cuadrados a los pabellones ya existentes de la fundación, además de un impresionante parque de esculturas de 45 hectáreas. Alberga una colección permanente con obras de artistas nacionales e internacionales, como Julio Le Parc, Gonzalo Fonseca, Frank Stella, Wifredo Lam y Joe Tilson. Esta colección incluye obras de artistas que han dejado una huella notable en la historia del arte, como Louise Nevelson, cuyas esculturas monumentales en madera se convirtieron en íconos de la escultura contemporánea. Todas las actividades del MACA y de la Fundación Pablo Atchugarry son gratuitas y abiertas a todo público, ya que apunta a ser un laboratorio y centro de reflexión artística.
Tus esculturas suelen transmitir una sensación de trascendencia. ¿Qué papel juegan los sueños y los deseos en tu proceso creativo?
Los sueños y los deseos son parte del proceso creativo y tratan de buscar un poco la parte del alma del ser humano y la posibilidad de irse superando en su recorrido.
¿Cómo influyen tus emociones y aspiraciones en el desarrollo de tus obras?
Las emociones son fundamentales para tratar de seguir recorriendo una obra. La obra nace buscando en el interior del ser humano, en este caso en mi interior, y esas emociones ayudan a que esas imágenes puedan salir a la luz a través de la emoción.
El mármol es central en tu obra. ¿Qué representa este material para ti como artista y ser humano?
El mármol es un material que ha sido utilizado en todas las épocas. Pienso en los artistas de las islas cícladas, en los de la Grecia arcaica y clásica, antes de Cristo, pasando por la Edad Media, los romanos, el Renacimiento y llegando hasta nuestros días. Trabajar con mármol es como conectarse con toda la historia del arte occidental, que ha utilizado este material como medio de expresión. Además, el mármol fue creado entre 15 y 45 millones de años atrás. Para un artista, el desafío es tratar de descubrir y revelar una imagen que ya existe en el mármol. Por ello, la relación con este material es muy directa y profundamente emocional. Hay que conocerlo en profundidad para lograr hacer cosas realmente especiales.
¿Qué desafíos y recompensas encuentras al trabajar con un material tan exigente como el mármol?
El desafío es realmente dejar una obra para la eternidad, el mármol es un material que no se deteriora, por lo menos si está custodiado o bajo techo. Es una relación con el tiempo, y el gran desafío es hacer una obra que pueda perdurar y que esté vigente a través de los siglos.
¿En qué proyectos estás trabajando actualmente? ¿Hay algo especial que nos puedas adelantar?
Estoy trabajando en la colocación de una obra de acero inoxidable que he donado a la Intendencia de Maldonado, que estará ubicada en la rotonda de la ruta 10. Lleva el nombre de mi hermano y se encuentra camino a la Fundación Atchugarry.
¿Qué mensaje te gustaría transmitir a través de tus esculturas a las futuras generaciones de artistas?
El mensaje yo creo que es ser coherente, respetuoso por la propia creatividad e imagen. No estar atado a modas, a caminos que son más breves y fáciles, pero que de repente no llevan al reconocimiento de la propia labor como artista. Quisiera que las nuevas generaciones del arte tengan el concepto de que hay que trabajar mucho para poder lograr su propia imagen.
Si pudieras hablar con un Pablo Atchugarry al inicio de su carrera, ¿qué consejo le darías?
Ser el mismo, no tener miedo de los golpes que la vida nos va dando, y que la clave es trabajar, trabajar y trabajar. Como decía Picasso, cuando llegue la inspiración que te encuentre trabajando.
¿Cómo te gustaría que el público percibiera tu legado artístico?
Me gustaría que el público reconozca el estilo personal de las obras –que es un poco lo que sucede hoy– y que estas obras le puedan dar una sensación de paz y armonía.
¿Cómo es la relación con tus obras de arte?
Me encuentro en mucha sintonía con mis obras. Por algo nacen, por algo las respeto y por algo también me acompañan a través de la imagen por mucho tiempo de mi vida.
¿Cuál fue el motor para crear el MACA?
Es una de las últimas obras de la Fundación Atchugarry en Manantiales, trata de que todas las artes tengan un lugar donde encontrarse, relacionarse y dialogar. Todo es un tema de diálogo y respeto hacia lo que han hecho diversos creadores.
¿Cómo te ves en diez años?
Me gustaría verme trabajando y entusiasmado. Quisiera seguir acompañando el museo y la fundación, que son proyectos muy importantes para mí. Ambos representan los pilares más fundamentales de mi expresión.